martes, 25 de octubre de 2011
viernes, 21 de octubre de 2011
Búscame cuando te apetezca, cuando notes que me echas de menos, cuando te mueras de ganas de tenerme. Búscame cuando no tengas a nadie que te diga que te quiere. Búscame cuando eches en falta las risas, las caricias que erizan la piel, las conversaciones sin rumbo, los abrazos en los malos momentos y las locuras. Búscame cuando necesites alguien que te sorprenda, cuando te des cuenta que nadie tiene esos detalles. Búscame cuando necesites que te digan lo especial que eres, lo bonita que es tu sonrisa, lo bien que lo haces y lo guapo que estas cuando te concentras. Búscame cuando mires el móvil esperando una llamada que ya no llega, cuando salgas y sin darte cuenta me busques con la mirada entre la gente, cuando inesperadamente alguien te toque la espalda y al girarte esperes que sea yo. Búscame cuando necesites cerillas para encender lo que se ha apagado, cuando mis ojos ya no te pidan guerra, cuando las discusiones sean aburridas y los días rutinarios. Búscame cuando las canciones carezcan de significado. Búscame cuando recuerdes los buenos momentos y te arrepientas de no tenerlos ahora. Búscame cuando tú ego necesite que le supliquen desesperadamente cariño pero sobre todo cuando quieras suplicarlo tú
martes, 11 de octubre de 2011
Digamos que he vuelto a tropezar con la misma piedra. ¿Y qué? La gente no lo comprende, se trata de mi piedra, yo decido si quiero pasar todos los días por el mismo camino y encontrarme con ella. Al fin y al cabo, es más cómodo tropezarse con la misma piedra, te acabas acostumbrando a la caída y por lo menos puedes decir que algo es tuyo de verdad. Total, vayas por donde vayas, está todo plagado de piedras
lunes, 10 de octubre de 2011
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